viernes, 13 de febrero de 2009
Los renglones torcidos de Dios
Una disgenesia cerebral congénita desencadena consecuencias severas multiorgánicas que harán, probablemente, que el tiempo de Rafita sea más breve de lo que debiera. Pierdo el tiempo muchas veces imaginando cómo habrían sido las cosas en condiciones normales..., pero, luego, concluyo siempre que lo que tengo no lo cambio por nada. Me preparo para cuando se vaya...
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Que Dios te bendiga, Rafita. Que Dios te bendiga, Rafa. Que Dios bendiga esa, seguro, maravillosa familia. Mariano.
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